La Canción del Universo

 Y ella bailó... Bailó sintiéndose en las nubes, en el cielo. 

Mantenía los ojos cerrados, y permitía que las sensaciones embargaran cada fibra de su ser.

Su alma irradiaba gozo, y lo sabía porque sentía una sensación inusual en el pecho; como de plenitud, como si se expandiera porque no le cabía en el tórax toda la felicidad que estaba sintiendo.

Elevaba su alma, su ser. Se hacía fuerte porque aunque le trajeran malas noticias, luego de su ritual de cada mañana, nada podía perturbar su espíritu. Se sentía poderosa e invencible.

Porque sabía que aunque era solo una gota en el mar, esa gota seguía siendo mar; y al estar en sintonía con las demás, tenía a toda la ferocidad del océano a su favor.

    

Incumpliendo las normas

 ¿Por qué es tanta la presión respecto al amor, a tener una pareja, a encaminarse en formar una familia?

"¿Y el novio para cuando?"

Francamente me parece ridículo. Solo creamos más ansiedad y tristeza en quienes no alcanzan las expectativas. 

Estamos criando a una generación que se conforma con migajas de lo que creen que es amor, tolerando todo tipo de maltratos y toxicidad solo por su inseguridad.

Todo por no saber estar solos, por pensar que "tienen suerte si alguien los quiere", por no saber de amor propio; y, por ende, no saber establecer límites.

Tan fácil sería si en lugar de preguntar que "el novio pa´ cuándo", romantizáramos y normalizáramos el amor propio. 

Difundir el respeto y amor a uno mismo, y enseñar a disfrutar de la compañía propia crearía un mundo más sano. 

Amate tanto que no permitas ni la falta de respeto más chiquitita. Adorate y respetate tanto que no quieras cambiar tu hermosa soledad por nadie que sume menos que más. 

Aprendé a quererte para aprender a decir "No". Para ser consciente de que merecés más, de que merecés lo mejor. Para aprender a soltar cuando no te hacen bien, cuando no te dejan avanzar.

Aprendé a aprender, a crecer, a madurar. Buscá una motivación, un sentido. Fijate metas bien grandes para correr detrás de ellas en lugar de detrás de personas. Vos podés más. Vos merecés más. Y al carajo quien te diga lo contrario.

Si no te amás vos, no esperes que lo haga alguien más. Y entonces, aunque nadie lo haga, te tendrás a ti mismo.

Clamor de Lord Dragón

¿Cómo gritar si enmudezco?

¿Cómo correr si siquiera me mantengo despierto?

¿Cómo ser, 

y sentir envuelto en la bruma de un mar incierto?

Mis huellas las borra el viento,

Y el calor de mi aliento es opacado por el tiempo.

Ahora aúno en el silencio,

Solo el deseo de un forte crescendo.

¿A quién acudir?

¿Cómo resistir?

Si sueño que vuelo, mas luego veo

Que mis alas no han logrado persistir

Y en ese instante en que recuerdo el cielo

Y sus sedosas nubes y su consuelo

y toda esa paz sin recelo

Vuelvo a creer en que quizá,

En algún momento,

Valgan la pena los desvelos.

Sara Reckziegel